El pasado miércoles comencé las clases de defensa personal del grupo que me ha sido asignado en el XLI Curso Básico de Policias Locales del IVASPE. En esta ocasión me encargaré de la formación a un grupo de agentes de unos veinte municipios de la Comunidad Valenciana.
La toma de contacto me ha parecido positiva y, aún cuando en su gran mayoría carecen de instrucción marcial, como les indiqué, estoy seguro que finalizado el curso se habrán conseguido los objetivos mínimos que me he propuesto.
La primera sesión, de cuatro horas, versó sobre los Ukemi aplicados a la función policial y las posiciones de seguridad y guardia, donde se indicaron ejemplos, también, para repeler una agresión haciendo uso del arma reglamentaria desde el suelo, ya que en estos supuestos la correcta caída y posterior posición de seguridad son fundamentales.
Más tarde se trabajaron, desde un Kamae básico, sencillas defensas activando dos miembros con la finalidad de agarre para la reducción, así como una tabla a la que se añadían a lo explicado diferentes técnicas de Ate Waza.
Posteriormente, y pasado el ecuador de la clase, pude introducir a las tablas diseñadas las correspondientes Kansetsu Waza, al menos como introducción a lo que tendrán tiempo de practicar durante los días venideros, donde se irán añadiendo Katame waza, además de iniciarse en otros grupos de técnicas.
De forma paralela, el Dojo parece volver a la normalidad después de las festividades, y nos disponemos a afrontar la recta hacia el verano.
En la imagen: Sode Guruma Jime en el Shibu Dojo